ALTERNA, SOCIALES.
En Época de Pandemia.

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El coronavirus ha afectado a la educación de más 1.500 millones de alumnos y alumnas a nivel mundial. Y es que, según las últimas cifras del 31 de marzo de 2020, 185 países han cerrado escuelas y universidades de todo su territorio, perjudicando al 89,4 % de la población estudiantil del planeta, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Para ayudar a las instituciones educativas a que realicen la educación online de la mejor manera posible, la UNESCO comparte 10 recomendaciones dirigidas a los docentes y los centros educativos.

1. Analizar el tipo de tecnología con la que se cuenta y elegir la más pertinente

2. Garantizar el carácter inclusivo de los programas de aprendizaje online y en caso de que todos no dispongan de dispositivos digitales, los gobiernos deben considerar la posibilidad de transferir temporalmente este tipo de dispositivos de las salas de informática a las familias, y facilitarles un acceso a Internet.

3. Proteger la privacidad y la seguridad de los datos

4. Crear vínculos entre las escuelas, los padres, los docentes y el alumnado durante el confinamiento para darse apoyo socioemocional. Se deberían crear comunidades virtuales

5. Planificar con frecuencia el desarrollo de los programas de aprendizaje online

El determinar si el programa de aprendizaje online debe centrarse en la enseñanza de nuevos conocimientos o reforzar aquellos ya adquiridos durante las lecciones precedentes.

6. Proporcionar a docentes y alumnado asistencia en cuanto al uso de las TIC, recomendar el uso de los datos móviles con miras a difundir los cursos en directo.

7. Combinar los enfoques adecuados y limitar la cantidad de aplicaciones y de plataformas.

8. Establecer las reglas de la educación online y dar seguimiento al proceso de aprendizaje

9.Mantener un ritmo de enseñanza coherente con las aptitudes metacognitivas de los alumnos y las alumnas, fundamentalmente para las clases que se difunden en directo. La unidad de aprendizaje del alumnado de Primaria no debe sobrepasar, de preferencia, los 20 minutos, y la de los de Secundaria, 40 minutos.

10. Crear comunidades entre el profesorado y las familias para favorecer los vínculos sociales